En 1942, la familia Kleniewski huyó de su lujoso hogar en la ciudad de Kluczkowice, en Polonia, cuando los nazis confiscaron su palacio. La acaudalada familia, una de las más ricas de la época, se marchó a Varsovia dejando atrás algunas de sus pertenencias más preciadas, entre ellas su colección de antigüedades. A pesar de su huida ningún miembro de la familia Kleniewski sobrevivió a la Segunda Guerra Mundial.
Según un informe en The First News, durante una reciente prospección realizada con un detector de metales en el palacio Kluczkowice, los investigadores han encontrado diversas antigüedades y, entre ellas, dos figurillas de bronce de 3000 años de antigüedad que representan al dios egipcio Osiris, un busto de bronce del dios romano Baco y una espada ceremonial del siglo XVII.
Tras años de investigación y con el permiso de la oficina de protección del patrimonio de Polonia, el cazador de tesoros local Krzysztof Kozłowski dirigió en mayo de 2022 una exploración de terrenos próximos al palacio en Kluczkowice con un detector de metales. Fue entonces cuando descubrió las milenarias estatuillas de bronce del dios Osiris que ahora se han dado a conocer.
Tras alertar a las autoridades sobre el hallazgo, Lukasz Miechowicz, del Instituto de Arqueología y Etnología de la Academia de Ciencias de Polonia en Varsovia, ha autentificado las piezas y cree que fueron comprados por Maria Kleniewska durante su estancia de cuatro meses en Egipto en 1904, que realizó para recuperarse de una enfermedad. En la época se trataba de una costumbre extendida entre las familias europeas más pudientes, debido al clima seco y cálido de Egipto.
Las figurillas de bronce localizadas muestran a Osiris, el dios del Más Allá, con su característico aspecto momiforme, con el cetro y el flagelo sostenidos en sus manos y cruzados sobre el pecho, y coronado con la corona atef.
Durante décadas, Miechowicz ha estado buscando la gran colección de antigüedades que atesoró la familia Kleniewski, cuyo palacio fue saqueado y convertido en un lugar para la recuperación de soldados alemanes heridos en el frente. El arqueólogo cree que el conjunto de la extensa colección que poseyeron los Kleniewski pudo haber sido enterrada en los terrenos del palacio para salvaguardarlas. El descubrimiento realizado podría se un indicio para corroborar sus sospechas.
Lukasz Miechowicz ha afirmado que “encontrar parte de una valiosa colección que se perdió hace muchos años, es de gran importancia para la ciencia, la cultura y el desarrollo del turismo en Polonia”.
Las figurillas de Osiris, así como la de Baco y la espada del siglo XVII, han sido donadas al Museo Nacional de Lublin que está situado a unos 30 kilómetros del palacio Kluczkowic.
Fuentes:
https://news.artnet.com/art-world/ancient-egyptian-roman-osiris-bacchus-polish-village-2301079.
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