Dos momias egipcias han permanecido ocultas durante 70 años en los cimientos de un restaurante de la cadena McDonalds. El historiador John Harper ha explicado que los cuerpos fueron depositados allí por la instigación que sufría su dueño, William McGregor, quien había conseguido adquirir una gran colección de reliquias egipcias en 1930.

En un principio enterró las momias en su propio jardín, pero decidió cambiar su ubicación al percatarse de que éstas se estaban deteriorando.

Durante la construcción del antiguo Palacio del cine que es donde se encuentra en la actualidad el restaurante, McGregor preguntó si podía enterrar en los cimientos del edificio las momias.

Éstas no han sido identificadas hasta el momento, y los expertos entienden que deben permanecer en su ubicación actual, descartando una futura excavación. Sin embargo, no piensan igual las autoridades egipcias, que ya las han reclamado.

Fuente: Vivir la Arqueología. nº 9