La Medicina y los Papiros Médicos en el Antiguo Egipto
Por María José Montero Fernández
28 enero, 2025
Papiro Ebers (detalle)
Modificación: 1 febrero, 2025
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   La salud y el bienestar fueron una de las artes más cuidadas en el Antiguo Egipto. Tanto los médicos (swnw), sacerdotes y magos participaron en el campo de la atención médica. Concibieron la salud y la enfermedad como una lucha incesante entre el bien y el mal. La medicina egipcia era un compuesto de elementos racionales, mágicos y religiosos. Aunque el tiempo ha borrado parte de su conocimiento, conservamos buena parte de su legado gracias al descubrimiento y traducción de los papiros médicos y ostracas (Tabla 1 y 2); estos nos introducen en sus patologías y remedios para poder comprender e investigar sobre su medicina. Las civilizaciones anejas de la época los consideraban precursores de la medicina y recopilaron buena parte de sus remedios. Nuestra realidad es tan distinta a la suya que adaptarnos a su entorno es complicado. El gran número de tratamientos nos confirma la capacidad de adaptación y cambio incesante en la especulación médica egipcia con el fin de mejorar el conocimiento de la enfermedad. Los productos naturales, tanto vegetales, animales o minerales son muy amplios y variados en Egipto que hace que su estudio sea laborioso (tabla 3). Se revelan ciertos diagnósticos certeros con respecto a nuestra realidad y una elección de las terapias muy adecuadas, sin embargo, en otros remedios el perjuicio en el tratamiento supera el beneficio de no actuar, sobre todo en enfermedades con mal pronóstico. Muchas enfermedades se ven reflejadas en la actualidad con las mismas características que hace 4000 años. Adentrándonos en este arte nos ayuda a poder comprender buena parte de su cultura que sin duda fascina en todos los aspectos.

Tabla 1: Lo papiros médicos más importante en el Antiguo Egipto (Adaptado de Nunn y Tapp 2000, p.148).

Título Localización Fecha aprox. de copia Contenido
Edwin Smith

Ebers

Kahún: ginecología

Hearst

Chester Beatty VI

Berlín

Londres

Carlsberg VIII

Ramesseum III, IV, V

Londres y Leiden

Cocrodilopolis

Brooklyn snake

Nueva York

Leipzig

Univ. College, Londres

California

BM 10686

Berlín

BM 10059

Copenhague

Oxford

BM 10072 y Leiden

Viena

Brooklyn

1550 ac

1500 ac

1820 ac

1450 ac

1200 ac

1200 ac

1300 ac

1300 ac

1700 ac

250 dc

150 dc

300 ac

Cirugía, trauma

Medicina general

Ginecología

Medicina general

Patología rectal

Medicina general

Magia

Ginecología

Ginecología, ojos y pediatría

Medicina general y magia

General

Picaduras de serpiente

Tabla 2: Ostraca médicos (Veiga 2019, p.19).

Nombre Utilidad
Ostracon Berlin 5570 Tres prescripciones para una enfermedad no especificada
Ostracon Deir el Medina 1091 Dos prescripciones para tratar la piel
Ostracon Deir el Medina 1242 Receta incompleta para una enfermedad no especificada
Ostracon Deir el Medina 1062 Proverbio y receta mágica para una enfermedad ocular. (ojo)
Ostracon Deir el Medina 1216 Magia para las enfermedades abdominales
Ostracon Deir el Medina 1414 Prescripción incompleta para una enfermedad no especificada
Ostracon Leiden 334 –– Prescripción para una enfermedad no especificada
Ostracon Louvre 3255 Prescripción para una enfermedad del oído  no especificada
Ostracon London 297 923 Prescripción para una enfermedad no especificada
Ostracon Turin 57104 Lista de partes del cuerpo
Ostracon de Tebas (Museo Real de Ontario) Prevención
Ostracon Bodleian Greek Prescripción de colirio (ojo)

  La observación y el estudio fueron fundamentales para sus logros en la medicina que fueron transmitidas a diferentes civilizaciones anejas. La primera contribución a las ciencias anatómicas fuera de Egipto fue a través del embalsamador egipcio quien a través del proceso de momificación exploró el cuerpo humano internamente a través de la hábil extracción de órganos con observación detallada. Los médicos egipcios también son muy apreciados por sus descripciones científicas racionales de dolencias y cirugías con cuidadosos detalles de la anatomía y los sistemas de órganos asociados. Los embalsamadores ocupaban una posición sacerdotal honorable en la sociedad egipcia, donde su función era, por motivos religiosos, preparar a sus muertos siguiendo técnicas complejas y elaboradas diseñadas para preservar el cuerpo humano para la vida más allá de la tumba. El embalsamador egipcio puede ser considerado como el precursor del anatomista en el antiguo Egipto. (Loukas 2011, p.410). El principio religioso de la Maat explicaba el orden, también guiaba su explicación sobre cómo funcionaba el cuerpo, por qué una persona se enfermaba y qué constituían estrategias de curación efectivas.

  Nos adentramos en su estudio, aunque somero, que nos dará lugar a revisar algunos ejemplos encontrados en los papiros médicos analizados. El último papiro médico fue descubierto en el año 1957 y actualmente se conserva en el museo del Louvre (Papiro Louvre 32457). Es el segundo papiro médico más grande, aunque su estudio está por determinar. El descubrimiento de los papiros suponía en el Siglo XIX un tesoro incalculable de enorme valor que aportaba información útil para la aplicación de determinadas formulas y análisis de los diagnósticos médicos.

Tabla 3: Denominación e imagen de algunas de las sustancias medicamentosas

Jeroglíficos realizados con Jsesh®, Fotos en https://www.klipartz.com/

   La actual investigación se basa en el estudio de 5 papiros médicos, que son los que más información nos aportan por su estado de conservación y por su temática (Tabla 1). El análisis también me ha llevado a encontrar problemas a la hora de trasladar la información a nuestro entorno:

– Los papiros se centran en describir un síntoma que no siempre se acerca del todo a una patología, por lo que no se puede relacionar de forma objetiva con una enfermedad.

– Muchas sustancias, tanto vegetales, animales como minerales no son conocidas, bien porque el nombre no se corresponde con el actual o por que han desaparecido.

– Las medidas utilizadas en las recetas para la preparación del medicamento no siempre son conocidas, por lo que las he quitado del texto de la receta, ya que lo importante en este trabajo era saber qué sustancias se utilizaban.

   Impresiona el amplio catálogo de productos medicamentosos que relatan los papiros, la riqueza de Egipto abarcaba muchas artes y esta es una de ellas. Debido su longeva historia, se ha creído que su cultura se mantenía inflexible, sin embargo, este conservadurismo egipcio que no debe interpretarse como resistencia a ideas nuevas o diferentes, sino que debe reconocerse como una reticencia a descartar por completo las concepciones más antiguas y valoradas de la sociedad.

Imagen 1. Relieve de la tumba de Ankhmahor en Saqqara con una representación de la práctica de la circuncisión (Montero, MJ., marzo 2019)

   El término egipcio para referirse a un médico es el de “swnw”; este término hace referencia a aquel que practica la medicina tradicional. Ahora bien, los médicos que estaban relacionados con la realeza tenían el título de “swnw per” que significa “doctor de la corte”. La especialización era bastante alta. Por ejemplo, estaban los “swnw khet” que era gastroenterólogos, o “swnw irty” que era el oftalmólogo. Incluso los dentistas llevaban el título de “swnw” como doctor de los dientes (Bencomo, et al. 2013, p.5). La medicina en Egipto se originó con el sacerdocio y quedó en sus manos. Los templos eran los hospitales y algunas de las habitaciones estaban reservadas para los laboratorios, donde se preparaba el incienso y las drogas. Estas son las farmacias más antiguas conocidas. Los sacerdotes-médicos comenzaron muy temprano a llevar los registros de sus casos en papiros conservados en los templos, de modo que con el transcurso del tiempo se recopiló una gran cantidad de información sobre el diagnóstico de enfermedades. Se creía que la enfermedad se debía al disgusto de los dioses o de los espíritus hostiles. El médico dependía tanto de la magia para curar a su paciente como de los efectos de las drogas prescritas. La administración de una dosis de medicina siempre iba precedida de la recitación de un encantamiento u oración a los dioses. Esta fórmula mágica debía ser repetida no solo por el médico que prescribía el remedio, sino también por el paciente (Warren 1931, p.1067). El poder de la magia invadió todos los niveles de sociedad. Casi todo el mundo usaba o llevaba un amuleto. En cada hogar se encontraban pequeñas estatuas del dios Bes que aseguraba el bienestar de los niños y la familia en general (Morton 1995, p.183). Los principios terapéuticos suelen basarse en factores etiológicos. La etiología de la enfermedad requiere un tratamiento dirigido a expulsar al demonio o apaciguarlo. Así, los procedimientos mágicos son una característica natural y lógica de esa porción de Medicina primitiva relacionada con las enfermedades internas (Leake 1952 p.34).  A pesar del componente marcadamente mágico religioso de su praxis, crearon una medicina sistemática y razonada, basada en la observación clínica; por ello, la civilización egipcia, en algunos aspectos, puede considerarse como la madre de la medicina (Martín-Araguz 2002, p.1185).

   La casa de la vida podría ser el per-Ankh, un hospital-escuela, fue la biblioteca donde se guardaron registros científicos y donde los sacerdotes aprendieron sus deberes. Los escribas futuros aprendieron conceptos jeroglíficos escritos, religiosos, pensamientos científicos y culturales del antiguo Egipto (Veiga 2019, p.37). Uno de los profesores famosos en ese momento fue llamado Seneh. Cambises. Como invasor persa, destruyó estas escuelas, pero de nuevo fueron restauradas por Darío I, que tenía la intención de hacerlas útiles para los enfermos y que sirviera como una conmemoración eterna de los dioses (Eltorai 2019, pp.78-79).

   La higiene personal era importante para el egipcio, usaban calcita en polvo, carbonato de sodio y sal en una pasta de miel para frotarse por el cuerpo con ello. Se lavaban con frecuencia y antes de las comidas. Los hombres estaban bien afeitados. Las mujeres también se afeitaron y depilaron. El objetivo era mantenerse libre de piojos púbicos y corporales. No todo el mundo lo consiguió, y lo sabemos por algunas momias encontradas con liendres (Morton 1995, p.184). La circuncisión era una práctica habitual, importante para evitar determinadas patologías relacionadas con el miembro viril (ver imagen 1). Algunos dicen que la circuncisión fue simplemente un parte esencial del aseo personal. Otros dicen que fue practicado por primera vez por los egipcios en tiempos predinásticos debido a la creencia de que el alma de la mujer en los hombres moraba bajo el prepucio y debe ser liberado antes de la edad adulta. Sin embargo, aparentemente no era más ni menos que un ritual de rutina para dar la bienvenida a un niño en la sociedad adulta (Morton 1995, p.184). Sin lugar a dudas, esta higiene permitió a los egipcios prevenir, entre otras, muchas enfermedades infecciosas.

   Algunos papiros tratan los temas médicos y, por lo tanto, se denominan papiros médicos (ver Tabla 1) (York y Steinberg 2010, p.29). Casi todos están escritos en hierático. Los analizados en esta investigación se identifican mediante una p y su nombre o abreviatura (por ej. pEbers 857) y son los siguiente

            • – Papiro Ebers (pEbers): Es el papiro médico más largo, datado en la dinastía XVIII, el noveno año del reinado del rey Amenhotep I) (Elhabashy y Abdelgawad 2019, p.2). fue descubierto por el egiptólogo Georg Ebers en una excavación en Tebas (Egipto) en 1873 y fue adquirido para el museo de la ciudad de Leipzig, donde todavía se encuentra hoy en día. Con casi 19 metros contiene 108 columnas) y 877 recetas y otros textos breves, que a veces no tienen un orden discernible. (Stuhr 2008-2013). Las recetas toman la forma de ungüentos, tiritas y cataplasmas; inhalaciones, y gárgaras; borradores, dulces y píldoras; fumigaciones, supositorios y enemas. Eran esencialmente empíricos y aparentemente bastante apropiados para los fines para los que fueron diseñados, en vista del probable estado de conocimiento en ese momento (Leake 1952 p.46).

          Imagen 2. Fotografía de parte del Papiro Ebers (pEbers), ubicado en la Biblioteca de la Universidad de Leipzig, Alemania.

          Papiro Edwin Smith (pSmith) (ver figura 1 e imagen 3): El pSmith recibió su nombre en honor al egiptólogo estadounidense Dr. Edwin Smith (1822 – 1906). Smith estudió Egiptología en Londres y París. Desde 1858 permaneció en Egipto, donde permaneció en Luxor hasta 1876 (Stuhr 2008-2013). En el Recto del papiro se conservan 17 columnas (probablemente 18 del anterior), en cuyo total se pueden distinguir 377 líneas 48 descripciones de casos. La secuencia comienza de acuerdo con el sistema de ordenación de entonces con las lesiones de la cabeza; luego siga el cuello, la clavícula, la parte superior del brazo, etc. Al describir las lesiones espinales, el tratado se interrumpe inesperadamente en medio del caso 48 (Stuhr 2008-2013).

      • Imagen 3: Papiro Edwin Smith  
        • – Papiro Berlín 3038 (pBerlín): debe su nombre actual a su lugar de almacenamiento en el Museo Egipcio de la colección de papiros en Berlín, aparece allí bajo el número 3038. Después de la primera descripción Heinrich Brugsch, a veces también fue conocido como «Papiro Brugsch». El rollo fue encontrado por Giuseppe Passalacqua, probablemente en 1826, en un jarrón de arcilla a 10 pies bajo tierra en Sakkara. Contiene recetas contra parásitos intestinales, enfermedades de la mama blanca, hematuria, tos, etc. Se señala que los contenidos textuales son de origen más antiguo. Así, en pBerlín 163a y pEbers 856a: “Principio del libro sobre el descenso del wxdw en todas las extremidades del cuerpo del hombre, ya que fue encontrado como un documento bajo los pies de una estatua de Anubis en Letópolis. Fue traído a la Majestad, el rey del Alto y Bajo Egipto, (Usaphais – Den), justificado» (Stuhr 2008-2013).
        • Imagen 4: Papyrus Berlin p.3038 (pBerlín 3038)
        • Papiro Hearst (pHearst): En el año 1901 un campesino llevó un rollo de papiro al campamento de la Expedición Hearst egipcia cerca de Deir el-Ballas. como muestra de agradecimiento por permitir que tomara adobe de los montones de desechos de las excavaciones para su uso como fertilizante. El papiro fue nombrado en honor a la madre de William Randolph Hearst (Nunn 1996, p.35). Contiene Recetas y refranes para el corazón, enfermedades de la vejiga urinaria, inflamación purulenta, abscesos dentales, mordeduras de animales, etc. (Stuhr 2008-2013).
        • Imagen 5: papiro Hearst (pHearst).

        • Papiro Kahún (pKahún) (ver imagen 6): Los llamados papiros Kahún fueron encontrados en 1889 por Flinders Petrie en el sitio de la ciudad cerca de Kahún en Fayum. Desde entonces se conservan en el University College de Londres. (Nunn 1996, p.34). Está dividido en varias partes y la UC 32057 es la dedicada en su mayoría al tratado ginecológico/obstétrico, siendo el más importante tratado sobre este tema encontrado del Antiguo Egipto (Stuhr 2008-2013).
        • Imagen 6: Papiro Kahún (pKahún) 

   Los procedimientos terapéuticos recomendados en los papiros médicos egipcios parecen, en general, ser relativamente sencillos, favoreciendo los procesos restauradores naturales que impliquen el menor daño posible al paciente. (Leake 1952, p.39). Los más completos son el pEbers y el pHearst. La tabla 1 enumera los más importantes papiros médicos que conocemos en la actualidad (Nunn 2000, p.147). Los médicos egipcios de todos los rangos tenían acceso a textos médicos que seguían una fórmula establecida. En estos papiros el título, generalmente nombra el síntoma principal con el que el médico debe trabajar. El tratamiento puede incluir drogas, sangrado, oraciones, ungüentos, fumigaciones y encantamientos (York y Steinberg 2010, pp.30-31).

   Ostraca (tabla 2): Además de los papiros con relevancia para el estudio de la medicina y salud en el antiguo Egipto, hay ostraca con inscripciones terapéuticas que son importantes y se recogen en la tabla 2 (Veiga 2019, p.19). Sin embargo, debido a su estado fragmentario por el paso de los años, no entran dentro del estudio de esta investigación.

Principales patologías recogidas en los papiros

   Muchas enfermedades se trataron con remedios farmacéuticos, estos, enumerados en los papiros médicos, fueron aproximadamente 2000 remedios registrados que proporcionan detalles de los ingredientes, método de preparación, dosis y vía de administración. Los ingredientes se obtuvieron del mismo Egipto o del comercio con el Cercano Oriente, África y las tierras del sur del Mediterráneo. Las dificultades para traducir los nombres se ha cuestionado la identificación de alrededor del 30% de ellos. La arqueobotánica y la fitogeografía se han utilizado recientemente para reevaluar estas prescripciones y su eficacia terapéutica y se han dado identificado 284 ingredientes (David 2008, p.1802). Había varias recetas para la misma enfermedad, fabricados según la estación del año. Un adulto puede tomar pastillas o una solución bebible, un medicamento triturado, pero un bebé solo puede tener el medicamento disuelto en la leche materna. El peso y la altura de la persona también fueron importantes para la elaboración de la prescripción (Veiga 2019, p.45). Se recomendó fumigar una casa con incienso y mirra (kyphi), pero no accesible para todos (Veiga 2019, p47).

– Enfermedades cardiovasculares:  La egiptología cuenta con cuatro importantes textos que exponen remedios sobre el corazón y su sistema vascular asociado dentro del corpus de papiros médicos. El corazón como fuerza central de un sistema de distribución de vasos y la importancia de observar su acción para determinar la condición de un paciente ya formaban parte de su conocimiento unos 2500 años antes de que el sistema cardíaco se mencionara por primera vez en la medicina griega (Shafik 1998, p.291). El corazón se consideraba el centro de una red elaborada de vasos no distinguidos (mtw «tubos / canales») que comprenden venas, arterias y ligamentos reunidos secundariamente en el ano (Ritner 2006, p.100).

Los mtw (ver Figura 2)  pEbers 854: “Principio del misterio del médico: El conocimiento del curso del corazón y el conocimiento del corazón”. pEbers 854a: “Hay mtw en cada miembro del cuerpo. Si ahora cualquier médico, cualquier sacerdote de Sejmet, cualquier hechicero pone sus dedos en la cabeza, en la parte posterior de su cabeza, en las manos, en el lugar del corazón, en los dos brazos y en cada pierna, sentirá el corazón, porque hay mtw en cada uno de los miembros de su cuerpo y el corazón habla delante en los mtw de cada miembro del cuerpo”. En el pSmith caso 1 también se menciona.

Cada uno está dividido en las conexiones del mtw. Sus significados incluyen vasos sanguíneos, varios conductos y también tendones y músculos, particularmente aquellos que son largos y delgados. También puede incluir nervios, no está claro si los antiguos egipcios tenían algún concepto del sistema nervioso. Lo que es transportado por los vasos no se sabe con certeza y se menciona a veces que puede ser aire, moco, orina, semen, entidades portadoras de enfermedades y también espíritus malignos o benignos. Aunque los egipcios no tenían una noción completa de la circulación de la sangre, la relación entre el corazón y los vasos implica una comprensión primitiva de los componentes principales del sistema circulatorio (Martín-Araguz et al. 2002, p.1189). El pEbers 856b introduce el concepto de mtw: “En cuanto a un hombre, hay 12 mtw en él, en su corazón. Son ellos, los que dan a todos sus miembros/extremidades”. Aunque probablemente el mtw sea el primer concepto rudimentario de sistema circulatorio en la historia de la medicina, en realidad los egipcios desconocían la fisiología vascular, al creer que las arterias transportaban aire (Martín-Araguz et al. 2002, p.1189). El mtw puede irritarse, ponerse rígido, caliente, hinchado y doler y los médicos egipcios utilizaron una variedad de medidas para calmarlos, tranquilizarlos y refrescarlos. De particular importancia fue tratar el mtw liberando el wekhedu (sustancia que había que eliminar del organismo) rectalmente; de ahí la importancia de los enemas (York y  Steinberg 2010, p.31). El alma de una persona estaba asentada en el corazón y el corazón se mantenía para el Juicio final. El ano funcionaba como uno de los puntos naturales donde los vasos mtw abierto al mundo exterior permitiendo el paso de sustancias hacia fuera del cuerpo. Otras aberturas naturales incluyeron los ojos, oídos, nariz y boca. Las heridas también permitían que la materia, generalmente tóxica, entrara o saliera. Los vasos mtw actuaban esencialmente como canales a través de los cuales diversas sustancias regularmente fluyen e irrigan el cuerpo. La salud dependía del equilibrio (Maat) de este movimiento al igual que el propio Egipto dependía de la regularidad y orden del Nilo inundando y regando los cultivos (Zucconi 2006, pp.2-3).

Figura 1: Ubicación anatómica de las lesiones consideradas en 48 párrafos de pSmith (Nunn 1996, p.28).

Figura 2: El sistema vascular según la fisiología faraónica. Muestra los vasos que se abren hacia el ano donde whdw puede ingresar a la circulación general (Chen y Chen 1991, p. 184).

  En pEbers 627: “Comienzo de los agentes de unción para fortalecer los mtw, remedios para el alivio de los mtw: grasa gato, ḫt-ʿwȝ (madera), pelo del árbol jqr (árbol desconocido) mezclar hasta formar una masa uniforme y ungir con él”.

  En pBerlín 163c: “Hay dos mtw en su pecho; son los que dan el calor al ano. Lo que se hace contra él como remedio: dátiles frescos, parte del sicómoro, agua; golpear hasta formar una masa uniforme, beber por el hombre, para que esté mejor, en cuatro días”.

  Se utiliza el cilantro, grasa de serpiente, guisantes, frutas variadas, incienso, comino, cerveza. Coloquinte, ocre, minerales, etc. Conseguir efecto vasodilatador por tener un pulso elevado (taquicardia), provocar vasoconstricción si el pulso es lento (bradicardia), etc.

  Algunos glucósidos vegetales demuestran una poderosa actividad cardiovascular, y el aloe y la mostaza contienen cantidades subterapéuticas (pEbers 191-200). Los diuréticos aumentan la velocidad del flujo de orina al reducir el líquido extracelular superfluo: las frutas (glucosa, sacarosa, manitol), el algarrobo y la miel, promueven la diuresis, y los antiguos egipcios los utilizaban para tratar el corazón. Debido a su efecto hipertensivo, la acacia está contraindicada como diurético, pero se cita en pEbers 200 (Campbell 2008, p.228).

– Enfermedades ginecológicas: Tenemos cuatro papiros relacionados con estas dolencias: pEbers, pBerlín, pCarlsberg y pKahún. En el pEbers la parte ginecológica se puede dividir en treinta y cuatro párrafos de los cuales los primeros diecisiete tienen un formato común. Comienzan más bien como el pSmith con las palabras “Instrucciones para una mujer que sufre de…”. El pKahún es donde encontramos las descripciones más completas en relación a los cuidados y al tratamiento de afecciones en el ámbito de la ginecología Los tratamientos sugeridos son variados e interesantes, e incluyen fumigación, masajes y medicinas que se introducen en el cuerpo en forma de pesarios o como líquido para beber o frotar sobre la piel. En pKahún columna 1, 23-25 “Examen de una mujer que duele en sus piernas y sus pantorrillas después de caminar. Debe decir de ella “son descargas del útero”. Debes tratarlo con un masaje de sus piernas y pantorrillas con barro hasta que esté bien”, Esta receta es práctica y lógica ya que aumenta la circulación en las piernas con el masaje. Otro ejemplo en pKahún columna 2, 22-25: “Examen de una mujer dolorida en todas sus extremidades y las cavidades de sus ojos Deberías decir de ella “son dolores del útero”. Usted debe tratarlo con una medida de aceite, ished (fruta), uvas, fruta de sicómoro con muescas, habas, moler y refinar, hervir y beber durante tres días”. Los tratamientos sugeridos son variados e interesantes, e incluyen fumigación, masajes y medicinas introducidas en el cuerpo en forma de pesarios o como líquido para beber o frotar sobre la piel. También se incluyen materiales más fragantes como varios aceites perfumados (Smith 2011, p.54).

   Los egipcios llevaban un control riguroso de la natalidad mostrándose una serie de tratamientos de uso anticonceptivo tanto en el pKahún como en el pEbers. La mujer que no desease concebir un hijo se la recomendaban mezclas formadas por extractos de acacia, leche agria, heces de cocodrilo, natrón y miel o compuestos de lino, miel y espiga de acacia en tapones impregnados que se introducían en la vagina. pKahún 21, columna 3, 6: “estiercol de cocodrilo, picado sobre ḥsȝ y ʿwyt-líquido(leche agria), espolvorear”. Supuestamente posee propiedades espermicidas, sería un anticonceptivo de barrera eficaz. En el pBerlín 192, también se habla de la anticoncepción: «miel, espolvorea sobre su útero, esto se hace en una cama de natrón». El natrón, una sal de carbonato, era el producto de limpieza supremo del antiguo Egipto. Se usó para la limpieza del hogar, así como para limpiar el cuerpo humano (Smith 2011, p.55). El pEbers contiene un amplio rango de prescripciones para dolencias femeninas, entre ellas se encuentra el prolapso uterino, fístulas entre el útero y la vejiga, quistes ováricos, amenorrea y menorragia, entre otras patologías no reconocibles. También en el pEbers 808, se encuentran remedios para la caída de los senos: “Remedio para impedir que caigan las extremidades de las mamas: Untarlas con la sangre de una mujer cuyas menstruaciones acaban de aparecer, y frotar con ella su vientre y sus muslos…”. El pCarslberg VIII trata también de pronósticos sobre la concepción, la esterilidad y el sexo del feto, aunque está en bastantes malas condiciones, pero muchas de sus recetas son parecidas a las de pBerlín 3038 y pKahún. En el pKahún también se incluyen materiales más fragantes, como varios aceites perfumados. Los últimos párrafos del texto dirigen su atención al embarazo, con recetas para la concepción que incluyen incienso, aceite fresco, dátiles y cerveza. El aceite de enebro, un estimulante uterino (pEbers 805), induciría el parto y hoy está contraindicado en el embarazo.

  En pBerlín 195: “De una mujer que no dará a luz: sustancia (¿) que debe fumarse con excrementos de hipopótamo. Si ella excreta orina junto con heces o flatulencia al mismo tiempo, entonces ella dará a luz. Si esto no es así, ella no dará a luz, porque algo se ha estancado en ella”.

– Enfermedades genitourinarias: La sección 11 del pEbers sobre remedios urinarios abarca desde la receta 261 a la 283 “Inicio de los remedios para eliminar la congestión de la orina haciendo que la región púbica sea dolorosa”. Utilizan el trigo, almendras, remolacha, cerveza, enebro, miel, frutas fibras, fayenza para el niño con problemas urinarios (pEbers 273), resina, caucho, ocre amarillo, sicomoro, etc. En definitiva, con el fin de remediar la retención de orina, la incontinencia, el dolor y la infección. Los demulcentes, como el trigo, la cebada, la miel y el mucílago de acacia, crean un ambiente alcalino hostil al crecimiento bacteriano, al tiempo que alivian el ardor y el dolor asociados con infecciones parasitarias o bacterianas. Su acción es física y efectiva. El natrón y la sal del norte influyen en el equilibrio electrolítico. El aceite de balanita, un antihelmíntico, solo se usó esporádicamente, lo que sugiere que los médicos no reconocieron su verdadero valor terapéutico. Puede que no siempre sea posible el diagnóstico, pero, sin embargo, los remedios que proporcionan alivio sintomático pueden evaluarse terapéuticamente (Campbell 2008, p.229) como la orina abundante, las retenciones de orina, las posibles infecciones. Actualmente se utilizan los diuréticos, antimuscarínicos y antibióticos para estos males. La evaluación de la pelvis en algunas momias identificaros enfermedades de transmisión sexual (ETS), como Chlamydia y Neisseria gonorrhoeae, sin embargo, las pruebas microbiológicas modernas no han demostrado esta hipótesis (Haimov-Kochman et al. 2005, p.7).

 – Enfermedades gastrointestinales:  El pEbers 25 demuestra claramente que conocían las propiedades purgantes de la planta de ricino. La sección 2 contiene 109 remedios laxantes y entre ellas el pEbers 4: “para eliminar una enfermedad en el abdomen. Guisantes; mezclados con cerveza, bebida por el hombre”. pEbers 5, “Otro remedio para el vientre que está enfermo, comino, grasa del ganso, leche, cocinar, exprimir, beber”. pEbers 6 “…higos, jšd fruta, cerveza dulce también”. pEbers 7: “medios para vaciar el abdomen: leche, frutos de sicomoro rayados, miel, cocinar, exprimir, beber en cuatro días”. pEber 8: “Para excretar: Miel, Harina de coloquintida, Hacer harina de planta s (¿ajenjo, Absenta?) un supositorio.

En pHearst 2: “Medios para vaciar el abdomen: šȝšȝ (¿); mezclarse con resina vegetal, hacerse en siete partes, sumergirse en miel, ser tragado por el hombre”. Se prescriben brebajes medianamente alcalinos y mucilaginosos suaves para el alivio del dolor en el lado izquierdo (¿dispepsia o úlcera?). Los laxantes promueven la defecación. Son irritantes, formadores de masa o lubricantes. Los irritantes como el aceite de ricino y coloquintida son estimulantes de la secreción de fluidos y la motilidad intestinal, se utilizaron en el Antiguo Egipto en cantidades terapéuticas. Los formadores de masa, como cereales integrales, higos y frutas, aumentan el volumen del tracto gastrointestinal. Los aceites lubrican el intestino y facilitan el paso de las heces. Los antiácidos aumentan el pH del estómago. Se utilizó carbonato de calcio (piedra caliza) a niveles terapéuticos desconocidos; sin embargo, el exceso produciría alcalosis metabólica. Usaban la leche agria como colerético. El agua de cebada, la leche y la miel se utilizaron como demulcentes estomacales, propiedades que se utilizan hoy en día, todas físicas en acción y sin límite terapéutico (Chen y Chen 1991, pp.184-185).

– Enfermedades musculo-esqueléticas: El tétanos se describe en el pSmith caso 7: “Uno con una herida abierta en la cabeza, que ha llegado hasta el hueso, la duramadre de su cráneo está perforada, sus dos mandíbulas inferiores contraídas, sangra por sus dos fosas nasales y sus dos orejas, sufre de rigidez en su cuello; una enfermedad con la que lucharé”. “Primer tratamiento; harás que uno haga algo caliente para él que sea agradable, debe abrir su boca y tomar con aceite/grasa, miel y fibras…”. El origen de este tétanos, que se muestra en tres fases, fue una fractura de base craneal con herida en el cuero cabelludo, donde se mencionan signos de meningitis (rigidez de cuello). En el pBerlín 76 existe una referencia escrita explícita a la parálisis de Bell: “Un fumigante para eliminar una deformación de un lado de su cara y la comisura de su boca: Fumar una especie de un árbol llamado ḫt-ds y beber cerveza dulce, para que sude”.

Muchos trastornos son el resultado de la tensión y el remedio es la inmovilización y el calor hasta que el hueso o el músculo sanen. Los antiguos egipcios usaban rubefacientes vasodilatadores, que aumentaban la circulación sanguínea e impartían comodidad y calidez. La trementina y la mostaza, utilizadas durante mucho tiempo en esta función, se utilizaron en el Antiguo Egipto junto con enebro, resinas de pino e incienso, realzadas por cataplasmas y vendajes calientes. La tolerancia del irritante determina el límite terapéutico. Como hoy, los antiguos egipcios usaban rubefacientes para controlar el reumatismo y también los antirreumáticos, el apio y el azafrán. (Campbell 2008, p.229).

– Enfermedades del oído, nariz y orofaringe: Los antibióticos se utilizan actualmente para aliviar las infecciones del oído, l equivalente terapéutico en Egipto era la malaquita, aceite y miel, pEbers 766: “Otro remedio para tratar el oído: puede tratarlo con enfriamiento significa, ¡No dejes que se caliente! Si el recipiente tiembla, entonces será para él: Frote ẖpȝw de malaquita, déselo en cuatro días”. La cera, que causa dolor y sordera, requiere remoción si se impacta, y hoy en día, se prescribe aceite de oliva para suavizar la cera. En el pEbers 764: “Principio de los remedios para el oído que oye débil: ocre rojo, hoja del árbol del jmA (¿Maerua crassifolia?,¿Zizyphus vulgaris o sativa?), frote finamente en behel fresco, dé al oído” y  pEbers 765: “para el oído que libera líquido pútrido: incienso en grasa de ganso, leche espesa de carne de res, bdt-ḥȝwrt, frotar finamente, hacer una masa uniforme, dar a la oreja”. Se utilizaron la igualmente eficaz grasa de ganso y aceite de Balanites. Hoy en día, las gotas de cloruro de sodio alivian la congestión nasal licuando las secreciones mucosas, y el pEbers 761: “Principio de los remedios para la rinitis: jugo de la dátil”, probablemente para ser aplicado en las fosas nasales, mientras que el pEbers 763 da un encantamiento dirigido contra la secreción nasal: “que rompe los huesos, que destruye el cráneo, que corta la médula ósea, que causa dolor las siete aberturas  de la cabeza de los seguidores de Ra, que adoran a Thot (para la curación)….“, prescribe “leche de uno que dio a luz a un niño y resina de goma fragante que dan a la nariz”. En pEbers 854b: “Hay cuatro mtw en sus dos fosas nasales.  Hay dos que dan el moco, y hay dos que da la sangre”. El antiguo equivalente de los descongestionantes contemporáneos era la goma de mascar fragante colocada en la fosa nasal. Los papiros también citan acacia demulcente, algarrobo, leche y grasa para calmar, y ocre amarillo, comino, cobre y maná como antisépticos; todas estas formulaciones se prescriben durante varios días. Se citan las propiedades anestésicas locales de la semilla de apio (pEbers 701), aunque su duración es a corto plazo (Campbell 2008, pp.230-231).

– Enfermedades de los ojos:  En pEbers 336: “Comienzo del compendio médico de los dos ojos”. Muchos remedios son administrados en forma de maquillaje (pEbers 16). Los remedios de pEbers 336 al 431. Las enfermedades oftalmológicas en el antiguo Egipto incluían ceguera, estrabismo, cataratas, conjuntivitis y tracoma (Veiga 2019, p.51). La miel se usó en muchos ungüentos, en parte para obtener la consistencia adecuada y quizás, en parte, debido a su efecto bactericida (Andersen 1997, p.338). En pEbers 854c: “hay cuatro mtw dentro de sus dos sienes, que en consecuencia dan sangre a ambos ojos, cada sufrimiento de los ojos surge a través de ellos y a través de la existencia de una conexión a ambos ojos. Si el agua desciende de ellos, entonces son los cuerpos de iris de los dos ojos los que lo liberan”. Además, se describen otros dos mtw que podrían hacer referencia al nervio óptico. En pEbers 387: “para la eliminación de los mtw sanguíneos en los dos ojos: resina de mirra seca, mineral nḥdt, maquillaje de ojos verdes, en partes iguales, dar a los párpados”. Las sustancias más utilizadas en las afecciones oftalmológicas fueron aceite de behen, enebro, cerveza, ocre amarillo, coloquíntida, ébano, ládano mirra, minerales, heces secas de cocodrilo, bilis de tortuga, sangre, el hígado, la grasa, la leche, la miel y la placenta. Acciones mecánicas como el calor, el frío (el rocío de la noche), se siguen utilizando actualmente. Se hacían diversas preparaciones para uso oftalmológico como las maceraciones, los ungüentos y las fumigaciones, las cuales se aplicaban en compresas sobre los párpados. También se aplicaban con una pluma de buitre la cual era usada como cuentagotas (Güemez-Sandoval 2008, p.125). El oftalmólogo era conocido como šwnw ỉrty y muchas veces se desarrollaban varias especialidades al mismo tiempo. Relacionaban el ojo con el conducto auditivo debido a la concepción anatómica que ellos conocían (Güemez-Sandoval 2008, p.125). También hay varios encantamientos donde se mencionan a los dioses (pEbers 385).

Remedio peligroso: pEbers 425: “para no dejar que un pelo crezca en el ojo después de que haya sido arrancado: incienso, frotado en las heces de lagarto, sangre del ganado, sangre del burro,  sangre del cerdo, sangre del galgo, sangre de la cabra, maquillaje de ojos negros, maquillaje de ojos verdes (antisépticos – Galena y Malaquita), frote finamente hasta obtener una masa uniforme en esta sangre, dar al lugar de este pelo después de que ha sido arrancado. No crece (más)”

– Enfermedades parasitarias  Las enfermedades parasitarias han sido un problema de salud importante en Egipto hasta nuestros días. Sin embargo. Es muy difícil hacer una identificación positiva de parásitos específicos en los textos egipcios (Nunn 1996, p.68). La Esquistosomiasis (bilharziasis) sigue siendo una causa importante de mala salud crónica en Egipto, debido a la infectación de parásito Schistosoma por las aguas del rio Nilo.

  Los parásitos entran al cuerpo humano a través de la ingestión de agua o comidas o por el contacto con la tierra, personas infestadas u otras sustancias: ténias, anquilostomas, gusanos redondos y otros parásitos fueron otros problemas comunes (Netzley 2002, p.187). En el pBerlín 1-10 expone las enfermedades parasitarias. Se utilizaron remedios a base de hierbas para las infestaciones parasitarias: hojas de acacia, cebada, comino, aceite de pino y raíces de granada. Además de los remedios minerales como el natrón, la malaquita, el aceite del desierto, el ocre rojo y el cloruro de antimonio, también se utilizaron remedios animales como la miel, el aceite blanco, la grasa de buey y la grasa de ganso. Para todos estos agentes, la cerveza o la leche o el vino constituían el vehículo necesario. La granada y el ajenjo son vermífugas conocidas. En pEbers 65: “Otro remedio para matar al gusano ḥfȝt (gusano intestinal): frutos secos, inmaduros, descorchados del sicomoro, dátil inmaduro, aplastar y dar cerveza espesa, bebida por el hombre”.

– Enfermedades de la piel: En el pEbers tiene una vasta información sobre esta patología que engloba:  Sección 3: Ungüentos para enfermedades de la piel, Sección 18: Remedios para la erupción cutánea, Sección 17: Curas para las picaduras, Sección 21: Curas para quemadura, Sección 22: Remedios para el tratamiento de las ronchas por golpes, Sección 23: Remedios para el tratamiento de heridas, Sección24: Remedios para el tratamiento de ampollas cutáneas, Sección 25: Remedios para úlceras, Sección 27: Remedios para las secreciones de heridas y sección 33: Remedios para el tratamiento de la superficie corporal.

  En el Recto pSmith se trata de la curación de heridas: La secuencia comienza de acuerdo con las lesiones de la cabeza; luego sigue con el cuello, la clavícula, la parte superior del brazo, etc. (ver figura 1).

El pSmith (1–48) y el pEbers (510–588) utilizaban miel, grasa y pelusa, después de debridar y suturar. Las heridas infectadas fueron tratadas con biocidas como malaquita, cobre, zinc y antimonio, cada uno de los cuales tiene una ventana terapéutica infinita. (Campbell 2008, pp.231-232)

  El tratamiento de heridas, cortes, magulladuras e hinchazones supurativas que eventualmente requirieran incisión podría quedar relegado al cirujano, pero las dolencias de la piel del recién nacido eran dominio de la partera. Las aflicciones de los niños después de la infancia preocupaban a los que se ocupaban de los niños enfermos, por regla general las ancianas sabias, expertas en el tratamiento de enfermedades de mujeres y niños. (Radbill 1975, p.363). Se aplicaron en forma de lociones demulcentes, que comprenden mucílagos, aloe y almidones, que recubren la superficie y protegen el tejido irritado subyacente. Los aceites vegetales, las grasas animales y las ceras protegen, calman e hidratan la piel y como emolientes, se utilizan comúnmente para tratar el eccema. Hoy en día, estos tratamientos se basan en cera, parafina líquida, lanolina, aceite de hígado de bacalao y urea, mientras que los antiguos egipcios usaban aceite de ricino, aceite de Balanites y orina de asno o de mujeres que habían tenido recientemente un hijo varón. Estos remedios contemporáneos incorporan antimicrobianos, pero los egipcios incluyen, como antisépticos, sal, incienso, ocre, alabastro y mirra, así como miel. La ictericia, vista como un problema de la piel, fue tratada con laxantes, que no tuvieron ningún efecto sobre la función hepática, pero mejoraron la palidez al eliminar la bilis. Las quemaduras (pEbers 482-509) se trataron con demulcentes calmantes, antisépticos protectores y biocidas, todos efectivos, pero los astringentes que usaban (trementina, cobre e incienso) serían dolorosos, aunque esto mejoró en cierta medida con aceites, grasas animales y miel. Algunos remedios y procedimientos resultaron tan exitosos ante las quemaduras que su aplicación continuó durante siglos. El pSmith menciona el tratamiento de las quemaduras con miel y grasa. El pEbers contiene la aplicación de lodo, excrementos, aceite y extractos de plantas. También utilizaron aloe y ácido tánico para curar quemaduras. Los antiguos egipcios no conocían los microorganismos, pero sabían que la miel, el pan mohoso y las sales de cobre podían prevenir las infecciones en la cicatrización de quemaduras. Se utilizaron tomillo, opio y belladona para aliviar el dolor. El tratamiento exitoso de las quemaduras se inició en los últimos tiempos y ha sido posible gracias a un mejor conocimiento de la fisiopatología de las lesiones térmicas y sus consecuencias, los avances de la tecnología médica y la mejora de las técnicas quirúrgicas (Pećanac, et.al 2013, p.263).

  El médico egipcio buscó eliminar el pus (excreciones) de las heridas, que se mantuvieron limpias y vendadas, generalmente con agentes antibacterianos efectivos como la miel y las sales de cobre (Ritner 2000, p.114). El médico analizó la presencia de wḫdw tomando el pulso y usó purga y enemas para tratar y prevenir su acumulación (York y Steinberg 2010, p.31): pEbers 488: “Otro remedio: prt-šnj fruta, jḥw-fruta, heces del gato, mezclarse, dar en agua de goma, darle”.

Cosmética: Una preocupación de los antiguos egipcios era la belleza y la juventud, durante toda la vida, y esto se demuestra por la existencia de un cuidado cosmético especial con propiedades medicinales. (Veiga 2019, p.48). La coquetería y el deseo de aparentar o de retornar a la juventud perdida tan querido de las culturas evolucionadas, cundió entre aquellas gentes tan amantes del bienestar y de tan alto concepto de sí mismo (Juaneda 2008, p.104). El cabello, usando ungüentos para hacer que un cuerpo sea firme, los perfumes que gotean eliminan parásitos y malos olores, tenían una propiedad antiséptica, todo esto termina se realizaba debido a su gran preocupación: el envejecimiento (Veiga 2019, p.48). Para reducir el efecto agresivo de la luz solar, los antiguos egipcios pintaron el área alrededor de los ojos con malaquita, mineral de cobre verde, extraído del Sinaí y las minas orientales del desierto; También msdmt ( ) o galena consistía en un polvo negro cosmético que protegía los ojos de la arena y la agresión del viento y también de las plagas de insectos (Veiga 2019, p.51).

– Enfermedades respiratorias: tos, tuberculosis, asma: En el pEbers 305: “Comienzo del remedio para eliminar la tos (seryt): Coloquintida fresca, poner en agua en una olla nueva, beber en cuatro días”. Hasta el pEbers 325 hay varios remedios para esta dolencia: leche, almendras, habas, harina. Todos estos remedios recogidos en el pEbers podrían identificarse con el asma o la tuberculosis, ya que las dos patologías producen tos. Con respecto a la tuberculosis, la describían con «espasmos debidos a las secreciones de seryt«. Consideraron que estas secreciones eran las responsables de la tos y la expectoración, sin buscar la fuente. Se reconoció la gravedad de la tos y podría conducir a la muerte Los egipcios usaban coloquintida, miel, dátiles o trébol dulce. La terapia egipcia también incluía fumigaciones, destinadas a transportar sustancias medicinales, pero también a expulsar los alientos patógenos: pEbers 325: “Otro remedio: resinas aromáticas, pulpa de dátil, para triturar en una sola masa. Irás a buscar siete piedras y las calentarás al fuego. Deberá tomar uno de estos y ponerle un poco de este medicamento. Lo cubrirá con una olla nueva, cuyo fondo habrá sido perforado. Pondrás el tallo hueco de una caña en este agujero, y colocarás su boca en la abertura de esta vara, para inhalar el vapor que exhala de ella. Lo mismo ocurre con las otras seis piedras. Entonces comerás una grasa, como carne, grasa o aceite». Además de las inhalaciones, se ofrece una dieta particularmente rica e inusual de la mayoría de los egipcios. Los beneficios de comer en exceso (Ziskind y Halioua 2007, p.1279).

  Un caso documentado de una momia egipcia de un bebé con tuberculosis encontrada en la tumba de Nebwenenef (TT 157) nos muestra que esta enfermedad afectaba a cualquier edad; el niño habría contraído tuberculosis por contacto cercano con una persona mayor infectada. Sabemos que la tuberculosis está producida por el Mycobacterieum tuberculosis y aunque los antibióticos son eficaces, hay que combinarlos y su tratamiento es prolongado actualmente. El asma es una patología pulmonar que actualmente se considera crónica y que provoca dificultad para respirar debida a la inflamación en los pulmones. Los expectorantes promueven la eliminación de la secreción pulmonar y se utilizó antimonio en el Antiguo Egipto para aflojar la tos seca. Otros remedios para la tos se encuentran en pBerlín nº 29-38, algunos de los cuales son paralelos a los pasajes del pEbers., 21 es un remedio similar a muchos en pEbers 305-25 contra la tos.

  En pEbers 190: “Si examina a un hombre con unos ataques de tos (seryt) que está estreñido, son levantamientos (setjesu) y su estómago se contrae. Entonces debes prepararle remedios eficaces para beber: pan fresco cocido en aceite y miel. šʿm (ajenjo), resina del pino piñonero, valeriana (shllshʿ): agréguelo y cocinar hasta una masa uniforme: beber en 4 días”. pEbers 316: “Otro (remedio): diente del cerdo; cortar finamente, poner dentro de 4 panes y comer en 4 días”.

El dolor y la fiebre: Wekhedu (wḫdw) :  (ver figura 2). Su traducción identifica dolor. Los egipcios sabían que los vasos transportaban sangre y aire de un lugar a otro. En pasajes en el pEbers, 856a y pBerlín 163a: “Comienzo de los textos recopilados del descenso de wḫdw, encontrados en escritos antiguos dentro de un arcón de archivo bajo los pies de Anubis en Letópolis, en el reinado de la Majestad del Rey del Alto y Bajo Egipto (Den I, Primera Dinastía), el justificado, después de debilitarse, y que fue llevado ante la Majestad del Rey del Alto y Bajo Egipto, Senedj, el justificado, debido a su eficacia. Ahora, este libro liberó las piernas constreñidas del rey a través de la agencia del escriba de las palabras divinas, el jefe de médicos que son excelentes para pacificar al dios. Ahora, el libro se va a realizar en servicio al disco solar cuando se presenta (es decir, al amanecer), con ofrendas de pan, cerveza e incienso en la llama, en el nombre de Isis la grande, Hor-khenty-khety (Horus, el más importante del cuerpo), Khonsu y Thoth, el dios que está en los cuerpos.

   En pEbers 246 se menciona el wḫdw. En pEbers 856h: Cuando se acumula en el cuerpo, la enfermedad y la muerte resultan: “Todos vasos vienen a su corazón, se dividen en su nariz, todos se unen a su ano. Cada enfermedad del ano surge a través de ella. Son sus wḫdw las que provocan la llegada de la enfermedad. Son los mtw a las dos patas los que empiezan a morir” y en pBerlín 163h, un exceso de wḫdw en el sistema provocó enfermedades, y la existencia del agente corruptivo aparentemente se demostró por la manifestación de pus en heridas o ampollas. Para la migraña hay varias recetas en el pEbers 250- 249 “Otro remedio: frutos del eneldo, frutos de la remolacha, frutos de cilantro, planta jnnk (¿tomillo?), ḫt-ds (¿mirto?), grasa de burro, ungir la cabeza con él en cuatro días”. En pEbers 627: “Comienzo de los agentes de unción para fortalecer los mtw, remedios para el alivio de los mtw: grasa del gato, ḫt-ʿwȝ (madera vieja), pelo del árbol jqrw (¿), hacer masa uniforme y ungir con él”. Para explicar el origen de las migrañas en el antiguo Egipto y cuál fue la terapéutica correspondiente, existen varias alternativas según el origen del dolor. En los papiros mágicos, las migrañas son causadas por acciones de «demonios y fuerzas sobrenaturales, en los papiros médicos» se da a los traumas y otros dolores que se sienten en el cuerpo. Por tanto, el tratamiento puede ser mágico, farmacológico o quirúrgico (Veiga 2019, p.53).

  El dolor suele ser sinónimo de fiebre en los papiros. La sal y el alumbre sin valor analgésico son antipiréticos. El apio, el incienso, la canela, el cilantro, el enebro y el benjuí, tienen poco valor analgésico. El cáñamo incorporado en un supositorio para refrescar el ano no tiene ningún beneficio terapéutico, pero es de apoyo físico (Campbell 2008, p.228).

– La diabetes: Agua del lago donde las aves beban, bayas silvestres, fibras de plantas, leche fresca y arbusto de cerdos empapados en cerveza, flor de pepino dátiles sin madurar (Veiga 2019, p.49). La sintomatología se identifica cuando el flujo de orina de los pacientes es incesante. La vida es demasiado corta, repugnante y dolorosa, la sed insaciable, el consumo excesivo de alcohol, que, sin embargo, es desproporcionado a la gran cantidad de orina o, si por un tiempo se abstienen de beber, su boca se reseca y su cuerpo se seca, las vísceras parecen quemadas; se ven afectados por las náuseas, la inquietud y la sed ardiente, y en poco tiempo mueren (Loriaux 2006, p.55). Esta patología se ha convertido actualmente en crónica gracias al descubrimiento y administración de la hormona insulina que hace eliminar el exceso de azúcar en la sangre.

   La primera referencia a la diabetes mellitus es gracias al pEbers que menciona remedios para el tratamiento de orina excesiva (poliuria). En pEbers 274-275 y 277-280 exponen remedios para eliminar la orina que es demasiado abundante para demasiada frecuencia. Desafortunadamente, la palabra crucial ʿshʿ puede significar dos cosas: y no está claro si la condición descrita fue poliuria (aumento del volumen de orina) o aumento de la frecuencia de la micción muy a menudo debido a la cistitis. La última condición es mucho más común y, por lo tanto, la interpretación más probable. Bastante similar es el remedio en pEbers 276 (281) que consiste en eliminar el apresuramiento, que sugiere evitar la urgencia de la micción debido a la cistitis o una vejiga irritable. Sin embargo, pEbers 264 se refiere a corregir (ʿḳʿ) orina en exceso (hʿw) que suena más a poliuria, quizás debido a la diabetes. En pEbers 273 expone disminución de la frecuencia de la micción hecho para un niño que sufre de humedad, todavía un problema familiar. En pEbers 265 es “otro remedio para eliminar el calor (tʿw) en la vejiga, cuando sufre retención (hdbw) de orina”. La primera parte sugiere cistitis, y la segunda obstrucción del flujo de salida debido quizás a una estenosis uretral o una próstata agrandada. Ambas partes ciertamente se aplicarían a una uretritis. La infección también se sugiere por referencia a lo que parece ser un material sólido en la orina: pEbers 261 es “expulsar nudos (tjsw) en la orina, y pEbers 267 para alguien que sufre de hnʿw en la orina, la palabra hnʿw es desconocida, puede derivar de la palabra henʿ que significa “junto con” pero adornada con un plural y pus como determinativo. En general, se obtiene la impresión de pus en la orina, aunque sería difícil excluir la posibilidad de cálculos o coágulos de sangre. Rara vez se han observado cálculos en el riñón o la vejiga, ya sea en el examen directo de una momia o por radiografía. (Nunn 1996, pp.91- 92)

– La vejez: Para los Antiguos Egipcios la vejez era una enfermedad más que había que tratar y por ellos en los papiros médicos se encuentran varias recetas para tratar de contrarrestarla. Varias secciones de los papiros médicos están dedicadas a detener los estragos de la edad. En pEbers 451-463 comprende remedios para evitar que el cabello se vuelva gris: En pEbers 464-474 está dedicado a remedios para hacer crecer el cabello en una cabeza calva. En general, los remedios incluyen varias partes de animales negros para aplicar sobre las canas y las cerdas de un erizo para la calvicie. El verso de pSmith termina con los remedios que se deben aplicar para transformar a un anciano en un joven (Nunn 1996, p.95).

Canas: pEbers 451 “Inicio de los remedios para eliminar el encanecimiento: tratamiento del cabello: sangre de un ternero, hervir en aceite, ungir con él” pEbers 463; pHearst 144-149 y 157, 158. pHearst 144: “Remedio para el crecimiento del pelo: ʿpnnt-animal (¿Nutria?) que se coloca en una capa esférica de arcilla, que se coloca en la llama. En cuanto después de que se recocido/hervido, debe darle en aceite/grasa, ungirlo muy a menudo”. En pEbers 854d: hay 4 mtw que se dividen a la cabeza, su confluencia está en la parte posterior de la cabeza, lo que en consecuencia produce una caída del cabello y una «calva.

Arrugas: pEbers 713-720; pHearst 152-154; pSmith 21, 3-6 y 6-8. pEbers 713 “Remedio para descargar el cuerpo: leche del burro, hoja de la espina acacia, {87, 2} planta dr-nkn (¿índigo?), dwȝt (¿) planta, oȝȝ parte del árbol ʿrw, miel, hervir y prensar, beber durante cuatro días”.

   En la receta 4 de la columna 21 en el pSmith: “Principio del libro para hacer un anciano un joven: Uno debe buscar un montón de ḥmȝyt (frutas duras), alrededor de dos sacos (¿). Entonces uno los aplastará y dará a la luz del sol. En cuanto a después de que se haya secado por completo, uno debe trillarlos como una trilla de cebada. Entonces se remueven hasta que queden los frutos/semillas correspondientes. En cuanto a todo lo que está resultando de esto, uno debe medir (él) y hacer que uno tamiza la paja en la trilla con un tamiz. Midiendo, así como todos los frutos/semillas resultantes. Hacer dos porciones: una de estas frutas, la otra de la paja, es decir, una como la otra tan grande. Entonces debe comenzar por ser hecho en una masa uniforme, en agua. Hacer una masa suave. Entonces uno debe ponerlos en la llama en una nueva cuba y cocinar completamente hasta que estén buenos. Reconoces que se cocinan, por el hecho de que el agua correspondiente se evapora y por el hecho de que se secan hasta que son como paja seca, sin humedad sobre ella. Entonces uno debe quitarlos de la llama. Pero en cuanto se haya enfriado, uno lo pondrá en un recipiente para lavarlo en el río. Entonces uno debe lavar (él) correctamente. Uno reconoce que están terminados de lavar, probando el sabor del agua que está en este recipiente”.

– La impotencia: Como en la actualidad, la disfunción eréctil era un problema importante en el antiguo Egipto. Se colocaron pequeños pedazos del corazón de un cocodrilo joven diseñados para proteger a las personas del mal. Estos se mezclaron con aceite de madera de nargin para crear la mezcla correcta y luego se untaron en el pene para restaurar su potencia. En pEbers 663 tiene el texto de una debilidad del miembro masculino (es decir, impotencia). El tratamiento es con hyoscyamus, sauce, enebro, acacia, mirra, ocre amarillo y rojo, etc. es un remedio local que se aplica al pene. De los que pudieron identificarse, se cree que los siguientes tenían componentes activos; algarrobo, enebro, pino y sandía. El algarrobo, por ejemplo, tiene un alto contenido de histidina, un componente principal de la histamina. Solo recientemente se ha demostrado que los ratones deficientes en histamina tienen una tasa de reproducción baja debido a la disminución del comportamiento de apareamiento de los machos (Haimov-Kochman et al. 2005, p.8).

Conclusiones

   Entre la fascinante cultura antigua egipcia, la medicina es un arte, considerada en Egipto, como pionera y experta. La importancia del embalsamador y de la especialización de los swnw llevo a intentar combatir la enfermedad con mayor exactitud. El embalsamamiento, en parte, es una de las causas del conocimiento anatómico humano y el componente mágico, como poder sanador, ha sido fundamental para ellos. La observación, estudio e interés han sido claves para el desarrollo de la terapéutica que se expone en este trabajo. La ubicación de Egipto entre los desiertos y regados por el Nilo, hizo que tuvieran muchos momentos de paz y tranquilidad para poder trabajar y estudiar mejor las enfermedades, además de intentar embellecerse y mantenerse jóvenes como en ninguna civilización de aquella época. Aunque muchos de estos conocimientos todavía no se conozcan por la difícil interpretación y traducción de los escritos en sus papiros, todos sus textos médicos, nos adentran en el conocimiento de las sustancias naturales y su experimentación ha sido muy importante para saber algo más sobre ellas. La riqueza de las sustancias medicamentosas utilizadas es muy amplia y en muchos casos, con increíble éxito en muchas patologías, como las infecciones, heridas, quemaduras, problemas ópticos, etc. En general productos bien utilizados en patologías agudas. Son estas las que más éxito tuvieron, mientras que las que nosotros llamamos crónicas, son las que ellos identificaron como de mal pronóstico. También hay que tener en cuenta que las dosis utilizadas no son muchas veces conocidas y en algunas sustancias una dosis mayor puede ser más perjudicial que beneficiosa. Otro aspecto a tener en cuenta, son las sustancias toxicas, que actualmente sabemos que lo son y que ellos creían beneficiosas. Destacable es su higiene, tan importante para evitar muchas infecciones. Aunque ellos no supieran de la existencia de los microorganismos, sí que observaron que la higiene era importante para prevenir multitud de enfermedades. El equilibrio y el orden como la Maat era fundamental. El corazón como símbolo del alma se cuidaba hasta la muerte. Cuando identificaban algo nocivo, lo evitaban para no causar males mayores. El whdw y el mtw son conceptos abstractos que podemos adaptar a nuestro entorno y saber que ellos querían buscar el origen de las enfermedades. El arte de la medicina egipcia no parece haber surgido desde la elaboración de los papiros estudiados, sino que parecen haber sido escritos mediante la recopilación de los saberes de muchos años atrás y puede ser un indicativo el texto de las recetas de pEbers 856a y pBerlin 163a donde se menciona al faraón Den de la primera dinastía. La medicina moderna, a partir del Siglo XX, ha sido revolucionaria gracias a la elaboración en el laboratorio de medicamentos sintéticos o semi sintéticos, que nos ayudan a transformar el mal pronóstico en cronicidad, como en la diabetes gracias al descubrimiento de la hormona insulina.

   No es sencillo el análisis de los papiros y ostraca médicos y el transportar la mente al pasado lleva un esfuerzo que muchas veces nos lleva a punto difícil de analizar y comprender. Ellos, sin duda, querían que proporcionase mejoría, lo que me lleva a la fascinación. Actualmente el Museo del Louvre (papiro Louvre 32847) cuenta con un nuevo papiro médico, el segundo más grande después del pEbers y su estudio puede ampliar el conocimiento de esta fascinante materia. El desarrollo de los conocimientos egipcios se vio mermado por el paso de los siglos debido al desconocimiento del lenguaje faraónico. No fue hasta el descubrimiento de la piedra Rosetta cuando se pudo empezar a analizar mejor todo este legado. Me pregunto, ¿Cómo hubiese sido el mundo si los conocimientos egipcios se hubiesen desarrollado desde el principio?… Ha sido una investigación fascinante y enriquecedora que se queda corta, ante tanta sabiduría.

 

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María José Montero Fernández, Farmacéutica de Atención Primaria. Madrid

 

 

 

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