Galletas shayt. Una receta milenaria del antiguo Egipto
Por Susana Alegre García
5 febrero, 2021
Galletas shayt o galletas de chufas
Modificación: 5 febrero, 2021
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Las galletas shayt tuvieron una gran popularidad en el antiguo Egipto y aún hoy podemos cocinarlas y disfrutarlas.

Las que aquí vamos preparar se basan en la receta que recoge el egiptólogo Pierre Tallet en su libro Historia de la cocina faraónica (p.68, Ed.Zendrera Zariquiey, 2002), a partir de documentación procedente de la tumba de Rekhmire, quien vivió durante la Dinastía XVIII (1570-1293 a.C.) y fue visir de Tutmosis III y de Amenhotep II.

Que conste que el objetivo de esta aventura culinaria no es realizar arqueología experimental, sencillamente se trata de intentar pasar un rato entretenido cocinando y luego paladear un sabor del que también disfrutaron los antiguos egipcios hace milenios.

 

Los ingredientes para las galletas shayt:
– 150 gramos de chufas
– 50 gramos de dátiles deshidratados
– 1 vaso de agua
– 50 gramos de miel
– aceite de oliva

 

La preparación:

Si seguimos exactamente el modo de preparación utilizado en el antiguo Egipto necesitaríamos moler los 150 gramos de chufas en un molino de piedra o puede que en un mortero; seguro que el resultado será más próximo al milenario si lo hacemos así, pero también el mundo moderno nos ofrece la posibilidad de comprar harina de chufa ya preparada.

Mezclar la harina de chufa con un poco de agua, amasar hasta conseguir una pasta consistente.

Deshuesar y triturar en un mortero los 50 gramos de dátiles, hasta conseguir una pasta. Añadir los 50 gramos de miel (una cucharada más si somos muy golosos), aunque hay que tener en cuenta que las chufas también son dulces. No esperemos en estas galletas la intensidad del dulzor que ofrece el azúcar y no olvidar que en el antiguo Egipto este ingrediente no era conocido.

Deshuesamos los dátiles y los partimos a trocitos para facilitar el triturado

Mezcla de los dátiles triturados y la miel 

Una vez conseguida la mezcla de dátiles y miel, muy espesa y enganchosa, además de bastante difícil de manejar en el mortero; hay que unirla y mezclarla bien con la harina de chufa que habíamos mezclado con agua.

Mezclar la pasta de dátiles y miel, con la harina de chufa humedecidaAspecto final de la pasta para hacer las galletas shayt

Preparada ya la masa de las galletas solo hay que darles forma: lo más tradicional eran triángulos, de aproximadamente un centímetro de espesor. En las pinturas de la tumba de Rekhmiré aparecen un repostero utilizando moldes triangulares específicamente diseñados para estas galletas, aunque yo la forma lo conseguí moldeándola con las manos. Seguro que la pasta se os pegará a los dedos, así que para remediarlo puede utilizarse harina de trigo para manejarla mejor. Aunque no aparezca en la receta recogida por Pierre Tallet, resulta bastante práctico y no es una aberración arqueológica, por así decirlo, pues también en Egipto existía la harina de trigo.

Los triángulos según la receta hay que freírlos con aceite de oliva, dejarlos enfriar y ya estarán listos para comer.

Si freír no es la mayor de tus habilidades, también puedes poner las galletas en el horno, precalentado a 180º y en unos 10 minutos estarán listas.

Preparadas para el horno

La galletas shayt ya horneadas

Mi experiencia al cocinarlas es que al hacerlas fritas resultan más grasientas, pero más dulces que si se preparan al horno. Así que en el caso de que queráis hacerlas horneadas, recomiendo poner más miel en la mezcla.

Listas para comer. Se pueden presentar mezcladas con frutas como dátiles o uvas.

Aunque es bastante fácil comprar harina de chufa puede ser que no esté en todos los supermercados próximos a vuestras residencias; entonces podéis sustituir la harina de chufa por polvo de almendra. Obviamente el resultado no es el mismo, pero os lo indico como opción.

He querido compartir con vosotros esta aventura personal en mi cocina con la esperanza de que os animéis a poner en práctica la receta. Lo cierto es que es muy fácil y con un resultado delicioso que, además, nos aproxima de un modo distinto y bastante directo a los antiguos egipcios.

Las galletas shayt fueron un manjar muy apreciado por los antiguos egipcios. No solo las comieron como postre, también consideraron adecuado mostrar el proceso de su elaboración en las paredes de algunas tumbas y su característica forma triangular puede ser reconocible en muchas imágenes de mesas de ofrendas. Incluso en documentos tan relevantes como el Papiro Ebers se menciona a estas galletas.

 

¡¡Que las disfrutéis!!  😀 

 

Autora Susana Alegre García 

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