El estudio del contenido de los vasos canopos, utilizados en el antiguo Egipto para guardar las vísceras de los difuntos momificados, es de gran interés tanto para la egiptología como para la investigación biomédica. Ahora un equipo de investigadores intenta desvelar algunos de sus secretos mediante el uso de rayos X, tomografías y resonancias magnéticas.

Canopic Jar Project, con la financiación del Swiss National Science Foundation, se propone investigar los contenidos de diversos conjuntos de canopos conservados en distintos museos europeos y estadounidenses desde un enfoque interdisciplinar. Así, radiólogos, químicos, médicos, especialistas en peleogenética… etc., aúnan sus esfuerzos para analizar los restos de vísceras que aún se preservan en algunos de estos recipientes.

No siempre el contenido de los canopos se conserva adecuadamente; en ocasiones algunos de los potes se encuentran aún cerrados y sellados, y su apertura podría dañar el contenido y producir contaminaciones. De ahí que técnicas como las radiografías, las tomografías y las resonancias magnéticas, que permiten analizar el interior de estos objetos sin necesidad de abrirlos, resultan especialmente útiles.

El estudio, que ya ha dado los primeros resultados, se espera que ofrezca luz sobre costumbres funerarias y sobre las enfermedades que se padecieron en el antiguo Egipto, pero además se espera que en el campo médico se consigan datos sobre la evolución de los patógenos, lo que puede ser de gran relevancia de cara al conocimiento más profundo de ciertas enfermedades.

Fuente:
Radiological findings in ancient Egyptian canopic jars: comparing three standard clinical imaging modalities (x-rays, CT and MRI). European Radiology Experimental, 29 junio 2018.