Un equipo de arqueólogos egipcios ha descubierto una tumba en el yacimiento arqueológico de El Lisht, a unos 300 metros de la pirámide del faraón Sesostris I (1971-1926 a.C.).
Se trata de una construcción que consta de un patio, de un corredor con bóveda de cañón y de un pozo de unos 3 metros de profundidad que da acceso a diversas cámaras funerarias en las que se han descubierto sarcófagos de piedra caliza. Los sarcófagos se encontraban abiertos y posiblemente ya fueron saqueados en la antigüedad. Uno de estos sarcófagos presenta tallada en su interior una singular ornamentación con forma de escalera.
El conjunto será explorado con más detalle en próximas campañas y se emprenderán tareas de conservación. Además en la capilla de la tumba se han descubierto algunos bajorrelieves e inscripciones que también han de ser estudiados y restaurados. Se espera que los textos permitan conocer al propietario de la tumba, quien hasta ahora no ha sido identificado.
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